SANTOS, EL GRAN FICHAJE INVERNAL

El déficit de jugadores zurdos que pudieran actuar por banda izquierda era algo conocido por todos. Se fichó a Kike Mateo para que pudiera actuar de media punta o en banda en función de las necesidades del equipo y el mister comenzó la temporada situando a Kike en esa posición, pero éste no cuajó grandes actuaciones y se vio relegado al banquillo.

Se probaron otros jugadores y otros esquemas, se dio prioridad al ataque por el centro y no por bandas ya que la carencia ofensiva por el flanco zurdo era evidente. Wakaso con su descomunal físico y su buena zurda demostró en partidos como el del Cartagena que quizá pudiera ser él ese jugador que tanto ansiaba el técnico. Pero cuando se le intentó dar continuidad  a “Waka” por banda se vio que se diluía y acababa realizando más tareas de contención que de ataque.

También actuaron por esa posición jugadores como Xumetra, el interior diestro, veloz, ágil y con regate. Palanca podía actuar por la diestra y éste por la zurda, pero se comprobó que a pierna cambiada Xumetra se anulaba a sí mismo. Adrian Ripa fue otro de los experimentos de Bordalás, saliendo de refresco en varios partidos y titular en uno en dicha demarcación. Ripa demostró que pese a tener mucha velocidad no era esa su función.

Y cuando todo empezó a nublarse a Bordalás se le iluminó la bombilla y colocó a Palanca en la zurda, a pierna cambiada. Palanca ha demostrado en esta demarcación el potencial que puede desarrollar, ha sido en ella en dónde ha mostrado su mejor nivel de juego, además de que ha marcado varios golazos en liga. Ahora, con la vuelta de Santos sí se ha recuperado al interior zurdo que tanto ansiaba el entrenador. Poco a poco el futbolista irá cogiendo el tono físico y el ritmo de competición hasta que se encuentre verdaderamente al 100%. Cuando eso ocurra Bordalás tendrá un problema de decisión, ya que tendrá dos grandes futbolistas para una misma demarcación. Bendito problema.

 

Pablo Salazar